Al menos 2,000 “indignados” intentaron hoy evitar la aprobación de los nuevos presupuestos de Cataluña, que incluyen importantes recortes sociales, bloqueando el acceso al Parlamento de esa región del noreste de España y empleando la violencia en algunos casos. Algunos representantes tuvieron que llegar al lugar en helicóptero, mientras que la mayoría de los diputados necesitó de una fuerte escolta policial para acceder a la cámara.


Las fuerzas de seguridad catalanas cargaron en varias ocasiones contra los “indignados” y así lograron abrir un acceso al Parlamento, situado en el céntrico Parque de la Ciutadella. Al menos 23 personas resultaron con heridas leves, entre ellas tres agentes, informaron los servicios sanitarios.

El presidente del gobierno regional catalán, Artur Mas, algunos de sus consejeros, la presidenta del Parlamento regional, Núria de Gispert, y otros diputados aterrizaron en helicóptero en el complejo para poder acceder al edificio.